Nos relata la diversidad y la igualdad a partes iguales usando como herramienta rostros humanos, defendiendo que todos somos libres, tan diferentes y tan iguales, sin distinción genérica, sexual, social ni de ninguna otra condición.

arcilla blanca, esmaltes y madera

Obra creada para la exposición “Equi-libre”

Anterior
Anterior

Ara, el último río salvaje

Siguiente
Siguiente

Encuentros